Boletines y Materiales FIP





CUESTIONARIO PARA EL ESTUDIO DEL ESTATUTO DE LA JOTACÉ

PRINCIPIOS BÁSICOS 
1.       ¿Qué es la JotaCé?
2.       ¿Qué significa que la JotaCé tenga autonomía organizativa? Ejemplificar
3.       ¿Cuál es su tarea respecto a los jóvenes? Ejemplifica
4.       La JotaCé busca ser “vanguardia de la juventud”. ¿Qué entiendes por vanguardia y cómo podremos llegar a cumplir este objetivo.
5.       Asumimos el Marxismo Leninismo. De qué manera podemos asimilarlo mejor cada día.
6.       ¿Quién fue José Carlos Mariátegui y qué representa para nuestra organización?
7.       Ejemplifica errores de dogmatismo y revisionismo y de qué manera se deben afrontar estas desviaciones y corregir.
8.       ¿Qué entiendes por Socialismo y cómo asumes su construcción?
9.       ¿Qué es colocar al ser humano en el centro de todo?
10.   ¿Cuál es la diferencia y relación entre Socialismo y Comunismo?
11.   ¿Cuál  es la relación entre Nuevo Curso y Socialismo?
12.   ¿Qué papel le corresponde a la JotaCé en la construcción de la unidad del pueblo peruano?
13.   ¿Cuál debe ser nuestra relación con las masas?
14.   ¿Qué entiendes por lucha política? ¿De qué manera lo realizas en tu organismo?
15.   ¿Cuál es la visión de la JotaCé acerca de la realidad internacional actual?      
16.  ¿Cuál es la estrategia del imperialismo norteamericano para América Latina y nuestro país?
17.   ¿Qué entiendes por internacionalismo y cómo ejercer este principio en nuestra organización? Ejemplifica.
18.   ¿Cómo asumir nuestra condición de militantes comunistas y la defensa del planeta y del medio ambiente?
CAPÍTULO I: LOS JÓVENES COMUNISTAS
19.   ¿Cómo debe ser el proceso de integración de un joven a un círculo de la JotaCé?
20.   Según la realidad de tu centro de trabajo, cuántos aspirantes para convertirse en militantes de la JotaCé existen. De qué manera se les viene ayudando en su preparación.
21.   Realiza una interpretación del Juramento para el ingreso del nuevo militante a la JotaCé. Renueva este Juramento en cuantas oportunidades sean posibles.
22.   Resume la Línea y Programa del Partido.
23.   ¿Qué significa tener como paradigma a José Carlos Mariátegui para la JotaCé?
24.   ¿Qué mártires del Partido conoces? Realiza una pequeña reseña biográfica de alguno de ellos.
25.   ¿Con qué héroe o mártir de la patria te identificas más y por qué?
26.   ¿Cómo aplicas creadoramente el ML en tu trabajo cotidiano?
27.   ¿De qué manera tu organismo se viene integrando a las distintas luchas de los trabajadores y del pueblo e incorporando en las actividades que viene realizando la juventud?

CAPÍTULO II: DERECHOS Y DEBERES DE LOS JÓVENES COMUNISTAS

28.   Qué consideras que debe mejorarse para que sea más efectiva la participación de la militancia en la toma de decisiones.
29.   ¿Qué elementos deben considerarse para elegir, fiscalizar y revocar a los dirigentes? Enumere en cada caso.
30.   ¿Qué implica ser elegido para cualquier cargo o responsabilidad?
31.   Cómo velar por el cumplimiento del inciso D del artículo 6 del Estatuto.
32.   De qué manera podemos hacer más efectivo nuestro rol como organismo para hacer cumplir el inciso E del artículo 6 del Estatuto.
33.   Ejemplifique con un caso lo dispuesto en el inciso F del artículo 6 del Estatuto.
34.   Cuál debe ser nuestra actitud respecto al ejercicio del derecho señalado en el inciso H del artículo 6 del Estatuto por parte un militante.
35.   Cómo se puede vigilar y evaluar el cumplimiento de los deberes señalados en el Estatuto.
36.   Por qué es un deber el estar organizado en una de las estructuras de la JotaCé.
37.   ¿Qué significa servir al pueblo y no servirse de él?
38.   De qué manera se expresa la fidelidad al Partido
39.   Reflexiona sobre la construcción de la JotaCé en tu jurisdicción. Señala experiencias y resultados.
40.   Cómo viene cumpliendo tu organismo la implementación del inciso D del artículo 7 del Estatuto.
41.   Realiza una breve exposición de la realidad de tu localidad.
42.   ¿Qué entiendes por Línea de masas y cómo viene cumpliéndose en tu trabajo?
43.   Por qué es importante trabajar por el fortalecimiento de la unidad de la JotaCé y del Partido.
44.   Por qué es importante practicar el autosostenimiento económico. Señale experiencias realizadas en tu organismo.
45.   Cómo hacer más efectivo el cumplimiento del deber señalado en el inciso i) del artículo 7 del Estatuto.
46.   ¿Qué significa realizar trabajo abierto, cerrado y ejercer la vigilancia revolucionaria? Señale normas de para este trabajo. Mencionar casos.
47.   Señale los valores que debemos practicar. Menciona ejemplos.
48.   Qué papel debe jugar la ética comunista en nuestro quehacer cotidiano.
49.   De qué manera tu organismo viene cumpliendo con las disposiciones y acuerdos de la JotaCé.



CAPÍTULO III: NORMAS FUNDAMENTALES DE ORGANIZACIÓN

50.   ¿Qué es el Centralismo democrático y de qué manera mejorar su implementación?
51.   Mencione algunos casos en que violenta el principio del centralismo democrático.
52.   Qué se requiere para perfeccionar el ejercicio de la democracia en la JotaCé.
53.   De qué manera se debe implementar un ejercicio adecuado del centralismo.
54.   ¿Por qué no están permitidas las abstenciones una vez tomadas las decisiones orgánicamente?
55.   De qué forma debemos enfrentar las contradicciones en nuestra organización.
56.   Cómo practicas la crítica y autocrítica en tu actividad cotidiana.
57.   De qué manera viene desarrollándose la dirección colectiva y la responsabilidad individual en tu organismo.
58.   Por qué es importante ejercer el control de las tareas y la rendición de cuentas.
59.   Cómo los organismos superiores deben rendir cuenta de su actividad y del cumplimiento de sus responsabilidades.
60.   ¿Tu organismo viene realizando un balance ordinario de su trabajo? Señala cada cuanto tiempo se realiza.

CAPÍTULO IV: ESTRUCTURA ORGANIZATIVA

61.   Por qué el círculo es el nivel básico en la estructura organizativa de la JotaCé y se le considera primera escuela de los jóvenes comunistas.
62.   Cómo desempeña su labor tu círculo. Mencionar aciertos, errores y correctivos.
63.   De qué manera se vienen desarrollando los deberes y derechos de la JotaCé en el círculo.
64.   Cómo se desarrollan las reuniones de tu círculo.
65.   ¿Existen círculos especiales en tu jurisdicción?, ¿Cómo evalúas su experiencia de trabajo?
66.   ¿Qué entiendes por órgano de dirección colectiva? Ejemplifica.
67.   Cómo viene desempeñando su rol de dirección tu Comité Local. Cuáles son las funciones principales de todo comité.
68.   Según los últimos acuerdos del Comité, ¿éstos vienen siendo asumidos en la actual labor?
69.   De qué manera se desarrollan las reuniones del Comité. Explicar.
70.   Se han producido reuniones ampliadas en el ámbito de tu Comité. Menciona la experiencia. Qué resultados se han obtenido.
71.   Existen condiciones para generar nuevos comités según la forma de trabajo que viene desempeñando la JotaCé en tu localidad.
72.   Los secretarios designados en los respectivos comités viene cumpliendo sus funciones. De no ser así señale los aspectos que obstruyen su labor y señala los correctivos necesarios.

CAPÍTULO V: CONGRESO Y OTRAS REUNIONES NACIONALES

73.   Por qué consideras importante la realización del Congreso nacional.
74.   Según tu evaluación consideras que se vienen implementando los acuerdos aprobados en el último Congreso Nacional. Por qué.
75.   Qué se requiere para que las decisiones congresales sean asumidas por la militancia y todo organismo.
76.   Cómo mejorar la participación en los siguientes congresos nacionales.

CAPÍTULO VI: ÓRGANOS NACIONALES DE DIRECCIÓN POLÍTICA

77.   En el marco de las decisiones congresales de qué manera podría hacerse más efectiva la ejecución de estas por parte del Comité Nacional.
78.   Qué características deben considerarse para ser elegido dentro del Comité Nacional. Ejemplifique.
79.   Según tu apreciación, vienen funcionando adecuadamente los órganos nacionales de dirección. Qué propones para mejorar y perfeccionar su funcionamiento.

CAPÍTULO VII: DISCIPLINA, ESTÍMULOS, FALTAS  Y SANCIONES

80.   Qué significa asumir la disciplina consciente
81.   Realiza una evaluación crítica y autocrítica del desarrollo de la disciplina en tu organismo y jurisdicción.
82.   Señala alguna experiencia en relación a la implementación del artículo 34 del Estatuto.
83.   Por qué crees que se desarrollan el cumplimiento de infracciones y faltas.
84.   De qué manera se transgrede premeditadamente el Estatuto.
85.   Cómo se incumplen los acuerdos congresales.
86.   Por qué las irregularidades en el manejo de fondos deben sancionarse.
87.   Señala con casos el desarrollo de actividades grupistas, personalistas y divisionistas.
88.   Cómo se puede expresar una infidencia o colaboración con el enemigo de clase.
89.   De qué manera se desarrolla la falta señalada en el inciso F del artículo 36. Ejemplifique.
90.   Mencione ejemplos de lo señalado en el inciso D del artículo 36.
91.   Cómo se desarrollan el  fomento  de relaciones y comunicaciones horizontales.
92.   De qué manera se pueden evitar o disminuir el número de faltas.

CAPÍTULO VIII: FINANZAS

93.   Menciona casos del desarrollo del autosostenimiento económico en tu trabajo de círculo o de comité.
94.   Cuál es el contenido ideológico que encierra el ejercicio de la cotización.
95.   Qué significa el ahorro, la planificación y establecer presupuestos anuales para los comunistas en el trabajo revolucionario. ¿Lo prácticas? ¿Cómo cultivar estos métodos en la JotaCé?

CAPÍTULO IX: SÍMBOLOS

96.   En tu labor cotidiana, haces usos del emblema, la bandera, la pañoleta e himno de la JotaCé. Señale experiencias.
97.   Qué emblemas tiene el Partido.
98.   Cuánto conoces de la historia de La Internacional.
99.   Interpreta el lema de la JotaCé: ¡Alegres, rebeldes y combativos por la revolución y el socialismo!

CAPÍTULO X: RELACIONES CON EL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ PATRIA ROJA
                                                                          
100.                       Explica la relación de fuerza principal a fuerza auxiliar.
101.                       Qué significado tiene ser la fuerza auxiliar del Partido y cómo venimos cumpliendo esta labor.
102.                       Explica la relación dirigente-dirigido.
103.                       De qué manera se viene cumpliendo esta relación en tu jurisdicción.
104.                       Ejemplifica los vínculos y relación entre la JotaCé y el Partido a partir de tu experiencia en el trabajo.
105.                       Conoces los documentos principales del Partido.

106.                       Cuánto la JotaCé se encuentra involucrada en las tareas que el Partido tiene en tu jurisdicción.
107.                       Cuánta labor viene realizando el Partido para el crecimiento y formación de la JotaCé a partir de tu experiencia en tu jurisdicción.

CAPÍTULO XI: DISPOSICIONES TRANSITORIAS Y FINALES

108.                       Cómo viene implementándose en tu jurisdicción el proceso de adecuación a las normas estatutarias y reglamento aprobado.  En qué aspectos debe adecuarse tu organismo. De qué manera tu organismo puede contribuir a este proceso.
109.                       Opina y sugiere de qué manera podría hacerse más efectivo el estudio, la comprensión y asimilación de nuestro Estatuto y Reglamento.

Lima, enero del 2011.









POR QUE SOMOS COMUNISTAS*

Esta es una pregunta que todo revolucionario debe hacerse y responder con honestidad y franqueza. No por desconfianza o convencionalismo, sino por lealtad a sus propias convicciones.

Ironizando la deserción de no pocos militantes comunistas, los escritores a sueldo de la burguesía suelen decir: en su juventud, radicales; en su madurez, conservadores. Los hechos, sobre todo si examinamos la experiencia de las dos últimas décadas en la que, centenares de dirigentes y cuadros que en un momento se reclamaron comunistas o revolucionarios terminaron haciendo tienda con los representantes del capital o promotores del neoliberalismo y el liberalismo, parecería darles la razón.

Según ese criterio el apasionamiento de los jóvenes comunistas y revolucionarios es un problema de edad, de inmadurez; de la misma manera que la madurez los torna ecuánimes, es decir en parte del sistema capitalista y reproductores de su ideología una vez pasado el sarampión juvenil.

Explicación tan simplista encubre la realidad más profunda del problema. Quienes asumimos el comunismo como ideología y como teoría de la revolución social estamos convencidos de la inevitabilidad de la sustitución del capitalismo, sistema basado en la explotación y la opresión del hombre por el hombre, por otro donde desaparezcan para dar paso a otro nuevo, sin explotados ni explotadores, sin oprimidos y opresores, basado en la justicia social, la igualdad, la solidaridad, la plena libertad: el socialismo.

El medio para lograrlo es la lucha de clases del proletariado, clase antagónica de la burguesía, cuyos intereses generales y concretos asume el partido comunista.

Pero el dominio y la hegemonía que ejerce la burguesía en la sociedad capitalista no se limita al ámbito económico; es también así en el terreno de la política, la ideología y la cultura. Lo nuevo que nace y está en desarrollo debe enfrentar, pues, una inmensa fuerza material y espiritual protegida desde el Poder estatal establecido, que nunca cederá un milímetro sin resistencia ni aceptará la pérdida de sus ventajas y privilegios.

A ello hay que sumar el surgimiento del imperialismo y su desbocado expansionismo actual bajo la égida de los EE.UU., que no tolera el derecho de los pueblos a la autodeterminación y menos que se instale el socialismo.

En cada etapa del desarrollo de la sociedad, la clase social económica y políticamente dominante posee el monopolio de los medios de comunicación y divulgación de las ideas, además del aparato de coerción para reprimir la ideología de las clases dominadas que están en contradicción con aquellas. La ideología de la clase dominante, por ello, como sostenía Marx, es siempre la ideología dominante en la sociedad.

La lucha es, pues, enconada y sin tregua en todos los terrenos y en todas las formas. No pocos revolucionarios débiles ideológicamente y vacilantes políticamente, como la experiencia lo demuestra, ceden a las ventajas que le ofrecen a cambio de la abdicación de sus convicciones,  a la tentación de la torta burocrática, a los privilegios que les ofrece el capital,  o se someten bajo presión del  chantaje y la represión. Resquebrajada sus fortaleza ideológica todo lo demás vendrá por añadidura. Así surgen los oportunistas o los tránsfugas del socialismo.

El comunista no es tal por razones solamente éticas o morales, porque le indigna los abusos, la explotación o la pobreza. Sus convicciones nacen de la constatación de que el capitalismo no está en condiciones de resolver las contradicciones fundamentales que aquejan a la sociedad peruana ni de satisfacer las necesidades materiales y espirituales de las mayorías ahora explotadas, oprimidas o excluidas,  ni la preservación del medio ambiente. Que un mundo mejor y superior es posible. Marx advirtió con lucidez que el capitalismo creaba las condiciones materiales para ese cambio, pero también la clase social que la haría posible: el proletariado.


Esta probado que en el Perú la burguesía, subordinada a la lógica y los intereses del imperialismo cuyo centro es Estados Unidos y Europa, no ha sido siquiera capaz de construir un capitalismo moderno ni un mercado nacional vigoroso. Esa es la dimensión de su dependencia y su atraso, de su fracaso histórico.

Está demostrado en los hechos que el Perú no tendrá un futuro exitoso siguiendo ese camino. Cambiar esta realidad desde sus raíces se llama revolución y socialismo. Un cambio de esa dimensión necesita contar con un partido político de clase, con  un destacamento político especial capaz de organizarlo y conducirlo y un pueblo trabajador capaz de realizarlo.

Una tarea de esas características exige una clara conciencia de sus alcances y consecuencias de parte de quienes militan en ese partido de vanguardia, un sustento teórico científico, crítico y revolucionario y una voluntad acerada  junto a elevadas convicciones y éticas de parte de quienes se atreven a enarbolarla. Ese sustento teórico es el marxismo leninismo, y esa voluntad el compromiso militante de los comunistas. No es suficiente, pues, la emoción social, el estado de ánimo beligerante o la repugnancia moral a un sistema que se pudre.

Asumir el comunismo es marchar siempre contra la corriente a la manera del salmón. Someterse a riesgos y asumir una voluntad de entrega a un ideal y causa justos sin pedir a cambio recompensas o ventajas personales. Entender la vida de una manera distinta a la que entienden la burguesía o el pequeño burgués que se mueve siempre entre la ilusión de ser alumbrador de lo nuevo y, al mismo tiempo, esperanzado buceador de los privilegios que pueda ofrecerle la burguesía. No es casualidad que la abrumadora mayoría del los “balseros” o tránsfugas provengan de esta cantera social.

Muchos de ellos, ahora disfrutando del “poder” apoltronados en los sillones de la burocracia toledista, no lo son porque perdieron su beligerancia juvenil, sino porque prefirieron acomodarse a los privilegios dentro del sistema,  porque se han vendido a cambio de trece monedas para colocarse al servicio de los “dueños del Perú”.

 
*Alberto Moreno. 



LA INTERNACIONAL

   Este himno de los trabajadores de todos los países está compuesto por dos artistas franceses: Pierre Degeyter (1848 - 1932) es el músico quien la musicalizo en 1888, texto compuesto por Eugene Pottier (1816 - 1887) durante la Comuna de Paris (1871).
    Los dos eran obreros: El primero se ganaba el sustento trabajando como tallista en madera. El segundo fue pasante de escuela, dependiente en una papelería y dibujante de tejidos.
    Este canto expresa con sencillez la consciente solidaridad del pueblo trabajador y hace vibrar por su letra y por su música a todos los proletarios del mundo. Escrito en 1871, permaneció ignorado durante mucho tiempo. Cantose primero, solamente por algunos militantes de Lila, en julio de 1888, en una fiesta organizada por la Cámara sindical de vendedores de periódicos. Fue popularizado después en los Congresos Socialistas de 1886 y 1889, y más tarde en todos los Congresos internacionales.
El canto de La Internacional
La Internacional se ha transformado en un canto universal porque sus estrofas contienen la sublimidad de un profundo y delicado sentimiento humano y el amor de los pueblos que sufren.
El autor del texto de La Internacional: Eugène Portier
Es la lucha final:
¡Agrupémonos y, mañana,
la Internacional
será el género humano!
A Eugène Pottier debemos la poesía que se transformaría más tarde en el canto de combate de la clase obrera: La Internacional.
¿Quién era Eugène Pottier?
En su solicitud de adhesión a la logia masónica "Los Igualitarios", que había sido fundada en Nueva York por un grupo de proscritos de la Comuna de París, se leen, sobre sus orígenes, estos detalles:
Nací en París, el 4 de octubre de 1816. Mi madre era devota y mi padre bonapartista. Fui a la Escuela de los Hermanos (cristianos) hasta los diez años y a la Escuela Primaria hasta los doce. Gracias a mis lecturas de juventud pude emanciparme de ese doble atolladero sin empantanarme.
En 1832 yo era republicano; en 1840, socialista. He tomado parte más bien anónima en las revoluciones de 1848: febrero y junio.
Del golpe de Estado al 4 de septiembre, permanecí intransigente: colaborar con los asesinos del derecho es prostituirse.
En 1864, tras más de treinta años de proletariado, me asenté en mi profesión de dibujante; los dibujantes industriales no tenían ningún organismo sindical. A mi instigación fundaron uno en el que constaban quinientos miembros antes de la guerra. Ese organismo se adhirió en bloque a la Federación Internacional.
Por mi intervención en ese movimiento fui elegido miembro de la Comuna en el segundo distrito. Hasta el 28 de mayo ejercí las funciones de alcalde; después de la ocupación de la alcaldía por los versalleses, me retiré hacia el distrito undécimo.
Yo había aceptado sin reservas el programa de la revolución del 18 de marzo: autonomía de la Comuna y emancipación de los obreros.
He aquí a Eugène Pottier. Añadiré que durante ese periodo él creía haber cumplido su deber. Y se consideraba favorecido puesto que había conservado su vida y su libertad, contrariamente a tantos y tantos que habían perdido una y otra.
Antes de trasladarse a Nueva York, Eugène Pottier había pasado dos años de exilio en Londres y otros dos en Boston.
Fue en París, durante los últimos días de entusiasmo y de lucha, donde vi, en medio de las demostraciones de exaltación revolucionaria, el grandioso espectáculo de la masonería adhiriéndose a la Comuna y extendiendo sus estandartes sobre nuestras murallas maltrechas por los obuses; fue en aquellos momentos cuando juré pertenecer, un día u otro, a esa organización. Ser uno de los compañeros de esa falange laboriosa.
Me presento, pues, al taller, a la obra: ¡Empleadme!
Así pues, Eugène Pottier, que se había salvado de la muerte durante la innoble masacre de la semana sangrienta, entregará a la clase obrera ese ardiente amor que siempre había mostrado hacia los humildes. Y cantará para el pueblo denunciando los prejuicios que dividen a las naciones. Se dedicará a hacer retroceder los odios y levantar el estandarte de una rebeldía sana y justa.
Contra la trinidad opresora que yugula al hombre convirtiéndole -excesivamente a menudo- en un ser resignado, escribirá Pottier sus cantos. Con ellos despertará a los dormidos, flagelará a los embaucadores y expresará su protesta contra las religiones, el militarismo y la propiedad privada. Cantará la rebelión, denunciará a los impostores y preparará el advenimiento de un mundo mejor.
Poeta de verdadera estirpe
Eugène Pottier compuso su primera canción en 1831; más o menos tenía 24 años.
Poeta y ciudadano de Francia, en los palacios de tiranos, con su delgada mano, ha grabado estas palabras: ¡Vivir libre o morir!
Un día que sus amigos se habían presentado en su casa para ofrecerle ayuda y asistencia, sin el menor titubeo, el poeta indigente les dijo: ¡Que se publiquen mis obras y que me muera de hambre!
Así nació "Quel est le fou?", la primera canción que abre la selección databa de 1849. Estamos en 1884.
Tres años después, bajo la responsabilidad de sus antiguos compañeros de la Comuna de París, se publicó su libro "Cantos revolucionarios".
Texto íntegro comentado de La Internacional
Eugène Pottier escribe en París los versos de este canto durante el mes de junio de 1871, inmediatamente después de la represión salvaje que ilustrará la derrota de la Comuna, mientras procuraba sustraerse a los consejos de guerra versalleses.
Pero tuvo que esperar hasta fines de 1887 para que La Internacional fuera publicada en una selección de cantos revolucionarios para la que Rochefort escribió un prefacio.
Entre estas dos fechas, Pottier había regresado a Francia tras el armisticio de 1879.
Si entonces no se adhiere a ninguna de las organizaciones socialistas constituidas es porque le parece difícil escoger. Por simpatía se halla atraído por Guesde y el Partido Obrero; no obstante no deja de colaborar en Le Socialiste, que era entonces el semanario central del Partido Obrero Francés.
Eugène Pottier muere el 6 de noviembre de 1887. Los funerales que París le reservó fueron grandiosos. Diez mil personas y centenares de banderas desfilaron tras la carroza fúnebre. Al llegar al cementerio, se pronuncian una avalancha de discursos, entre los que sobresalen los de Eugène Fournière, Edouard Vaillant y Louise Michel.
La Internacional es un poema que expresa, en seis estrofas, los conceptos esenciales del mundo socialista. Amputarlo, cambiar el texto, es cometer una granujada sin nombre hacia su autor y hacia la idea que representa en estas estrofas, en las que Eugène Pottier ha condensado lo mejor de su ideal de socialista y de rebelde.
He aquí, en primer lugar, la llamada a la acción. La clase obrera debe tomar conciencia de su fuerza y obrar en consecuencia.
En pie los condenados de la tierra,
en pie los esclavos sin pan.
La razón resuena en su cráter,
es la erupción final.
Prescindamos del pasado:
multitud esclava, en pie, en pie,
el mundo va a cambiar de base,
no somos nada, seámoslo todo.
Eugène Pottier es un veterano de la Comuna. No ignora que, ya entonces, las bellas ideas y asociaciones son utilizadas por los arribistas que procuran servirse del dinamismo de la clase obrera para fines dudosos y para desviarla de los verdaderos caminos de liberación.
No hay salvadores supremos,
ni Dios, ni César, ni Tribuno,
productores, salvémonos nosotros mismos,
decretemos la salvación común.
Para que el ladrón devuelva lo robado,
para acabar con la idea de sumisión,
soplemos nosotros mismos la fragua,
golpeemos el hierro mientras está caliente.
Error voluntario o no, La Internacional publicada ese 1 de mayo de 1948 por el Partido Comunista de Bélgica llevaba ni Rey... en lugar de ni Dios.
Dios representaba la religión, César personificaba el gobierno, mientras que el Tribuno representaba la política.
Encuadrado con estas estrofas:
No hay salvadores supremos,
productores, salvémonos nosotros mismos.
No había posibilidad de confusión.
Esta trinidad: Dios, César, Tribuno era, en la época en que Pottier compuso su Internacional, el hilo conductor de todo lo que contenía el "programa" reivindicativo de las luchas para la liberación del género humano, esclavo del mundo capitalista cuya autoridad reposaba sobre la religión, el gobierno o el Estado y la política, que servían de lacayos vendidos en cuerpo y alma al régimen inicuo, que toleraba y justificaba la explotación del hombre por el hombre.
De entre sus obras inéditas extraemos, de una poesía titulada Simples consejos, su segunda estrofa que dice así:
En el Estado, el poder se funda
sobre fechorías y crímenes.
¿Debemos hacer un nuevo mundo?
¡Hagámoslo!
Como podemos ver, también en estos cuatro versos Pottier acusa al Estado. El Estado tiene una larga historia: es toda ella sangrienta.
Además, en su crítica al Estado, Eugène Portier no precisaba a qué categoría de Estado hacía alusión.
Cuánta razón tenía y cuán exacta fue su previsión, puesto que La Internacional sigue siendo la verdad eterna frente al Estado, sea cual sea la estructura que se le quiera dar para acomodarse con la política.
El Estado reprime y la ley engaña,
el impuesto sangra al desgraciado.
Ningún deber se impone al rico,
el derecho del pobre es una palabra vacía.
Basta ya de languidecer tutelados,
la igualdad quiere otra ley:
¡Ni derechos sin deberes
ni deberes sin derechos!
Denunciando la explotación del régimen capitalista, Pottier resume, en seis estrofas, la economía inhumana que defrauda al trabajador en su labor.
Repelentes en su apoteosis
los reyes de la mina y el rail
¿Han hecho jamás otra cosa
que desvalijar el trabajo?
En la caja de caudales de la banca
lo que (el obrero) ha creado se ha fundido.
Pero Pottier afirmará en los dos versos que terminan esta estrofa la "legalidad" de la "recuperación" por los trabajadores de todo cuanto les ha sido arrebatado. Es, en cierto modo y con pocas palabras, la legitimidad de la expropiación por la revolución.
Decretando que se le devuelva,
el pueblo no pide más que lo que se le debe.
Y llegamos a esa famosa estrofa que ha sido prometedora para nuestros socialistas y para los comunistas, encenagados dentro del parlamentarismo, la dictadura y todos los compromisos que implica la política reformista, que no es "ni chicha ni limonada" sino solamente defensa de los intereses personales, de clan o de partido.
La proclamación del internacionalismo ha sido aplazada, sirviéndose los interesados en desplazarla de mil y un supuestos, todos engañosos, con reservas que implicaban esas colaboraciones nacionalistas y fantasiosas del socialismo o del comunismo nacional.
El odio a la guerra se ha transformado sensiblemente y con mucha precaución en un murmullo. Pese a algunas imprecaciones contra el dios Marte, las resoluciones valientes hubieran podido poner punto final a las masacres. Pero todo ha sido abandonado. La huelga de los ejércitos y la culata al aire se han adaptado para combatir en defensa de los regímenes capitalistas que adornaban las guerras con la belleza de las palabras: ¡libertad, justicia, civilización!
Los reyes nos embriagan con sus vanidades,
paz entre nosotros, guerra a los tiranos.
Apliquemos la huelga a los ejércitos,
¡culata al aire y rompamos filas!
Al menos, la cosa era clara. A fuerza de clamarlas, estas palabras habrían podido convertirse en realidad. ¿Por qué frenar el impulso espontáneo de las masas movidas por la subversión provocada por esos versos? Sí, ¿por qué? ¿El miedo a las responsabilidades? Quizá. Pero ¿no debían acaso exigirse garantías para participar en los gobiernos de esas sociedades anónimas civilizadas y ordenadas?
Si se obstinan esos caníbales
en hacer de nosotros héroes,
pronto sabrán que nuestras balas
son para nuestros propios generales.
¿Por qué fue frenado el impulso de esa juventud antimilitarista por los mayores que aceptaban su sacrificio, rehusando ellos a sacrificar, por poco que fuera, su tranquilidad?
Pottier afirma en su poema la esperanza de la cercana liberación de los trabajadores. Sus esfuerzos conjugados pondrán fuera de combate a los explotadores de la tierra para hacer reinar en ella la paz y la fraternidad.
Obreros, campesinos, nosotros somos
el gran partido de los trabajadores.
La tierra pertenece a quienes la trabajan,
el holgazán irá a vivir fuera.
Y tras cada estrofa, Eugenio Pottier había encontrado para el estribillo versos lacónicos, llenos de fervor, entereza y brío:
Es la lucha final:
¡Agrupémonos y, mañana,
la Internacional
será el género humano!
Es necesario haber oído cantar este estribillo repetido por miles de voces para darse cuenta del dinamismo que comporta. Pero es necesario que quienes lo cantan hayan comprendido su significado y, habiéndolo comprendido, deseen sinceramente realizar esas aspiraciones.
La canción pertenece sobre todo al pueblo. Es en los corazones y en el alma de los trabajadores, de las multitudes más o menos maltrechas y oprimidas de los campos y de las ciudades, donde se hallan los acentos más briosos y más bellos. Al parecer los sufrimientos y las aspiraciones de las masas se expresan sobre todo en los gritos de música o en esas breves y melodiosas quejas que son las canciones. En el tesoro artístico no existe nada más precioso que el conjunto de los cantos de rebeldía, de resignación, de dolor o de ternura, nacidos espontáneamente, según parece, del seno de la multitud. Henri Barbusse (carta a La Muse Rouge).
El canto de La Internacional fue interpretado por primera vez el 8 de julio de 1888.
Eugène Pottier, su autor, muerto el 6 de noviembre de 1887, jamás oyó cantar su poema. Este hecho, tan extraordinario como extraño, merecía ser señalado. Hay que saber que Pottier publicó sus canciones en dos selecciones. La primera fue editada en 1884 bajo el título: "Quel est le Fou?" (¿Quién es el loco?). El segundo libro está fechado en 1887, se titulaba "Cantos revolucionarios" y fue prologado por Henri Rochefort.
Henri Rochefort escribe: Tras las masacres de 1871, el viejo combatiente ha respirado la pólvora y toda la sangre derramada le ha subido a la garganta. Los versalleses pueden estar tranquilos. Su memoria no morirá. Ellos han hallado su Juvenal...
En París y en junio de 1871, Pottier compuso La Internacional y la dedicó a su compañero de la Comuna, el ciudadano Gustave Lefrançais.
Este canto, perdido entre muchos otros reunidos en un volumen olvidado, "Cantos revolucionarios", al que ni siquiera se alude en los artículos consagrados a su autor en ocasión de su muerte, ¿cómo es posible que pudiera salir un día de la oscuridad y hacerse tan famoso?
En cuanto a La Lyre des Travailleurs, G. Delory, uno de sus organizadores que más tarde sería alcalde de Lila, interesado en que la coral interpretara algunos cantos más conformes con la propaganda socialista y habiendo conocido los "Cantos revolucionarios" de Pottier recién editados, se sintió atraído por un canto que se titulaba La Internacional.
Y tuvo la idea de hacer componer una música que se adaptara al texto. Para ello se dirigió a Degeyter, uno de los miembros de La Lyre des Travailleurs que tenía reputación de compositor. Le confió los textos de Pottier, le indicó muy especialmente el canto que le interesaba y le pidió que hiciera algo de ritmo vivo, arrebatador.
Tras un ensayo de la coral y en posesión de los versos de Pottier, Degeyter se pone a trabajar. Inmediatamente se siente literalmente entusiasmado por las palabras que componen el texto en cuestión. Los versos de La Internacional le inspiran y las notas y frases musicales brotan rápidamente unas tras otras.
Degeyter es músico. Músico militante obrero, de profesión montador en los talleres de Lives-Lille. En los cursos nocturnos del Conservatorio de Lila había aprendido ese difícil arte de la armonía. Tocaba varios instrumentos y era compositor aficionado. Tenía cuarenta años cuando, con la ayuda de un simple armonio, escribió la música de La Internacional, cuyo borrador llevó consigo al taller, donde habló con sus amigos, entre ellos Thoilliez. Hace ligeras modificaciones y poco después, La Lyre des Travailleurs se pone a aprender La Internacional.
A fines de julio de 1888, la Cámara Sindical de los Vendedores de Periódicos organiza una fiesta, en la que participa La Lyre des Travailleurs. En el programa está incluida La Internacional, que se cantó por primera vez en público. Pero La Internacional no va más allá de la región. Se propaga en Tourcoing, Armentiéres, Roubaix e incluso en Gante, pero continúa siendo ignorada más allá de las dos fronteras.
De la primera edición del canto de La Internacional se imprimieron 6.000 ejemplares. En esa edición el apellido del autor de la música no va precedido del nombre a fin de evitar las susceptibilidades de Pierre Degeyter, hermano del presunto compositor. Esto exige las debidas aclaraciones.
Es en el XIV Congreso Nacional del Partido Obrero Francés, celebrado el 20 de julio de 1896, donde La Internacional inicia su expansión.
A ese Congreso asistieron delegados alemanes, austríacos, españoles y rumanos.







La labor ideológica de los comunistas

Empecemos por preguntarnos ¿qué es ideología? Toda persona tiene una determinada ideología, la cual en las sociedades de clases lleva un sello de clase. Se expresa en ideas, criterios políticos, morales, jurídicos, religiosos, filosóficos, actitudes, valores, concepciones y comportamientos prácticos, muchas veces convertidos en sentido común, en supuestas verdades que no requieren mayor demostración. Digamos de forma más precisa, en las sociedades de clases sus integrantes pertenecen a una clase o fracción de clase cuyo sello se refleja en el pensamiento, percepciones, sentimientos e intereses.

Ideología es el conocimiento sistematizado, es un sistema de ideas, concepciones y criterios sobre la realidad. Es expresión de las necesidades e intereses de clase. De ahí que cada uno piensa de acuerdo a como vive y no al revés, cada uno tiene una ideología diferente según sus intereses. Este concepto debe tener una aplicación diferenciada en las personas, por ejemplo algunos explotados no tienen conciencia de su clase y tienen aspiraciones de convertirse en personas exitosas al modo capitalista.
En el proceso de explicar el fenómeno ideología por lo general se ha partido desde una concepción dogmática y no dialéctica, resulta así que nuestras respuestas frente a los hechos y conductas terminan erróneamente en fórmulas esquemáticas donde la teoría se ha congelado en el tiempo. Antes lo ideológico tenía una explicación idealista, con Marx y Engels se plantean nuevos ángulos para definir este concepto, ambos definieron mejor el tema, ambos también hicieron de la dialéctica materialista el método para explicarse éste y otras ideas.


Es recomendable antes que otro libro para comprender lo que es ideología, estudiar las primeras páginas de “La ideología alemana” pues está basado en la concepción materialista de la historia. A la pregunta de dónde surgen las ideas de los hombres responderemos de la realidad, donde no se puede desligar lo objetivo de lo subjetivo que también es comprendido en la práctica pues existe. Diremos entonces que el pensamiento del hombre cambia a medida que cambia el desarrollo de su práctica.


Dos interrogantes más para este tema serían: ¿es la ideología una forma de la conciencia social? y ¿podemos hablar de ideología y cultura por separado? Sobre la primera hay que decir que todas las formas de conciencia social son reflejo de la ideología; y acerca de la última, que no se puede separar cultura e ideología, pues cada clase que llega al poder transmite sus ideas, valores y cultura, siendo más compleja las sociedades como la nuestra, que arrastran una ideología y cultura de siglos de opresión. En conclusión la ideología es un reflejo de la conciencia social y tiene un contenido de clase.


“Ideología es ante todo conciencia. Conciencia es actitud de lucha” Fidel Castro.


Para los comunistas ideología es, además, la fuerza espiritual y moral que nos da la fuerza para atrevernos a luchar, venciendo cualquier dificultad hasta lograr el objetivo. La ideología de los comunistas, de su Partido y su fundamento teórico es el Marxismo Leninismo, la concepción del proletariado, que debe actuar según la realidad y condiciones concretas. Es una guía y no un dogma, es una teoría que se desarrolla, dando repuestas a los problemas del mundo y del país.


Al asumir la concepción e ideología comunista admitimos su influencia en todos los aspectos de la vida y de nuestra labor. Que es la mejor arma que tiene el Partido de vanguardia para orientar la acción de las masas. Y que para transformar el mundo, primero debo empezar por transformar mi mundo subjetivo, pensamientos, creencias, valores y conductas.

¿Se puede hablar de trabajo ideológico?


En una sociedad no todos se dedican a la producción material, pues hay quienes realizan la producción espiritual y transmiten las ideas para reproducirlas en ella.


Hemos dicho también que la ideología no está separada del concepto de clase, que no existe ideología en abstracto e igual para todas las personas. El capitalista observa la realidad de una manera y los trabajadores de otra, pues de por medio hay intereses contrapuestos ya que uno es el explotador y el otro el explotado.


La ideología dominante es la capitalista pues es la burguesía quien detenta el poder económico y político.


Nuestra tarea es desmitificar “sus verdades” en confrontar sus ideas con la realidad, en mostrar al pueblo lo que es justo, educarlo y organizarlo para la lucha revolucionaria, esto es trabajo ideológico. Es la labor básica para nuestra unidad y accionar práctico. Es educar y capacitar a nuestra militancia en el marxismo leninismo y su método dialéctico. Es crear valores como la solidaridad, la fraternidad, la laboriosidad, la actitud crítica y autocrítica, la unidad y el patriotismo. Es crear fuertes convicciones sobre nuestras ideas, inculcar la confianza en el pueblo, indignación ante toda explotación y fe en construir un país y mundo nuevo.


¿Cómo desarrollar la labor ideológica?


El trabajo ideológico debe tener el enfoque leninista, es decir de sistema e integral. Debe ser la labor encargada de inculcar la cultura y valores de la sociedad que se quiere o está construyendo. Por tanto debe ser un proceso dirigido, ya que hay una dirección consciente de esa labor.

Se asienta sobre dos principios.


1. Se aborda desde un enfoque partidista o filosófico que es partir desde nuestra concepción materialista dialéctica. Tiene una marcada concepción de clase.


2. La actividad ideológica debe abordarse según el momento histórico concreto donde se desarrolla. Para eso hay que conocer las contradicciones y la tendencia histórica de ese momento.


Lo importante en todo momento es desarrollar el contenido ideológico que se debe transmitir a las masas, para eso es necesario contar con algunas herramientas las cuales son:


a. La elaboración de una teoría científica de la realidad, tarea en la cual nuestro Partido tiende a perfeccionarse al ir avanzando en formar su propio pensamiento sobre la sociedad peruana y el mundo. Sería un error no crear mecanismos de discusión para elaborar una teoría que explique la sociedad pues implicaría ser una organización alejada de la realidad. Demás está decir que esta teoría debe responder a los intereses de clase que nosotros defendemos.


Algunos instrumentos para esta tarea podrían ser la creación de un centro de investigación, círculos de estudios, formación de conferencistas, etc. En fin de cuentas es prestar atención a crear nuestra propia intelectualidad.


b. Creación de un sistema de propaganda, de difusión de esas ideas y teorías. No basta contar sólo con buenos propagandistas sino diseñar los mecanismos o estructuras capaces de llevar nuestra política e ideas a las masas. Es considerar nuestra labor a través de distintos medios de comunicación. Lo más importante en el trabajo de propaganda es trasladar la esencia de nuestro mensaje y política al pueblo.


c. Una tarea insustituible es la agitación política al ser un trabajo directo con las masas pues lo que debemos garantizar siempre mediante toda nuestra estructura es hacer llegar nuestra política afuera. Para esto se deben combinar distintos medios tales como la creación de círculos o reuniones de estudio con trabajadores y la población, conferencias y mecanismos de movilización en centros de trabajo, estudio y residencia.


d. Comprender la tarea de desarrollo de la labor ideológica como un sistema dirigido desde el Partido y en la cual-en este caso-su juventud forma parte de este proceso. Debe comprender la formación política, teórica y cultural de nuestra militancia. El diseño de una política de cuadros. De un sistema de escuelas.


Contar con recursos materiales y humanos dedicados a este trabajo. Y ser una labor ordenada que responda a las necesidades concretas según las condiciones del momento, el área de trabajo y las tareas señaladas.


e. Teniendo como perspectiva estratégica las victorias venideras- el propio triunfo revolucionario-,nuestro Partido tendrá que preocuparse en incidir ideológica y políticamente en todos los sectores de la sociedad; es decir su labor ideológica consistirá en desarrollar este trabajo sobre toda la sociedad.


Esto es ya tener en cuenta el diseño de un sistema educativo, señalar el papel de los cuadros para las distintas instituciones u órganos de gobierno, el propio rol que debe jugar la familia, sabiendo de la importancia de utilizar todas las estructuras sociales con el fin de defender los espacios conquistados, la victoria y poner al enemigo una barrera impenetrable.


Desde hoy debemos perfeccionar nuestros niveles de información empezando por aprender a pulsar los sentimientos y expectativas de la población, lo cual tiene que comprometer a todo militante, los organismos de base, las diferentes estructuras y funcionar como un sistema. Más adelante esta labor puede recaer en activistas, en la conformación de un centro de estudio sociopolíticos y para el área cultural una estructura dedicada a prestar una atención especializada.


Conoce a tu enemigo. Su actividad ideológica


Decíamos que nuestra tarea consiste principalmente en desenmascarar las ideas y patrones de conducta de la reacción que se reproducen por todos los medios y estudiar el contenido del mensaje del enemigo y saber darle respuestas.


Hay que conocer cómo inciden las ideas del imperialismo y de la derecha en la población que son difundidas sobretodo a través de los medios de comunicación. Hay que tener en cuenta que el imperio tiene órganos especializados para atacar los distintos movimientos progresistas y revolucionarios. Comprender que sus ataques son diferenciados para cada país teniendo a las derechas locales como sus más fieles ejecutores.


Estamos frente a un enemigo poderoso que no dará tregua ni concesión alguna. Este enemigo no vive los momentos de gloria de antes, pues cada vez está más desprestigiado, lo que no significa que caerá por propio peso, sino es por la abierta batalla de ideas que hemos de darle con el arma más poderosa que tenemos que es nuestra ideología.


Marzo 2010.


Sergio

Sec. de Formación Ideológica Política

JC del P Patria Roja

No hay comentarios: